TRABAJO DE CAMPO





EL ANCIANO CON CÁNCER

Gómez Portilla A., Martínez de Lecea C., Cendoya I., Olabarría I., Martín E., Magrach L. et al . Prevalencia y tratamiento de la patología oncológica en el anciano: El reto que se avecina. Rev. esp. enferm. dig. [revista en la Internet]. 2008 Nov [citado 2012 Nov 12] ; 100(11): 706-715. Disponible en: http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1130-01082008001100007&lng=es. http://dx.doi.org/10.4321/S1130-01082008001100007


Esta página abarca mucha información sobre el tema del anciano con cáncer ,facilitandonos así  la comprensión de dicho tema y ayundandonos a ampliar nuestra información ya que  cada vez hay mas población anciana y el número de casos de cáncer es cada vez mayor.
Dentro de el podemos encontrar gran variedad de explicaciones sobre problemas geriátricos.

Hace referencia a una definición muy precisa sobre el cáncer, los aspectos de la población , epidemiología, factores de riesgo, diferencias de tolerancia al tratamiento según la edad , tratamientos (cirugía, radioterapia, quimioterapia, hormonoterapia). Sin olvidarse de mencionar los diferentes tipos de cáncer: mama, colon , cuello uterino , próstata y gástrico.




El cáncer es una enfermedad ligada a la edad, y aumenta su prevalencia conforme aumenta la población en su grupo de mayor edad. Las mejoras en los estudios de cribado, resultan en un diagnóstico más precoz de la enfermedad, lo que unido a la disponibilidad de mejores opciones terapéuticas, contribuyen a un mayor número de supervivientes de cáncer.
De los supervivientes por cáncer a largo plazo, 65% son mayores de 65 años, y de ellos 22% por cáncer de mama, 17% por cáncer de próstata, 11% por cáncer colorrectal y 10% por cáncer ginecológico .
En la población anciana desgraciadamente hay un menor diagnóstico de enfermedades cancerosas, y un mayor número de diagnósticos tardíos y/o imprecisos; ambas cosas producen un tratamiento inadecuado del cáncer en la población mayor. El origen de esta diferencia y dificultad diagnóstica estriba por una parte en la disminución de la autopercepción de enfermedad por el propio paciente anciano, y en consecuencia en un retraso en su comunicación, unido a la falsa creencia en la población general de que las posibilidades de desarrollar un cáncer en los pacientes ancianos es menor y, finalmente, al factor de la atribución errónea de los profesionales de la medicina de que las alteraciones clínicas que padece el paciente mayor son producto de la vejez y no una manifestación de enfermedad.
El diagnóstico de cánceres en estadio avanzado se asocia a menudo con un inadecuado cuidado de la salud y es, en general, un indicador de fatal pronóstico para casi todos los tipos de cánceres . Una atención sanitaria no eficiente para un grupo de población diana desemboca indefectiblemente en la marginalidad de este grupo de población. Y suele disfrazarse en la vejez en un llamado "problema social". Combatir esta discriminación sanitaria constituye una de las principales prioridades en la estrategia para el mantenimiento de la salud del anciano. La aplicación de estudios de cribaje poblacional en pacientes mayores de 70 años, daría muy buenos resultados por su eficacia, en el cáncer de mama y cáncer de cuello de útero y endometrio en la mujer, en el de próstata en el varón y en el cáncer colorrectal en ambos sexos .
El diferente resultado de los pacientes tratados por cáncer en la senectud puede deberse tanto a tratamientos estándares aplicados que sobrepasan las reservas biológicas de los pacientes, como a tratamientos paliativos administrados a pacientes erróneamente etiquetados como no capaces de soportar un tratamiento convencional.
Es aceptado ampliamente que el tratamiento del cáncer puede ser salvador de la vida en pacientes totalmente funcionales, sin embargo pude agravar los síndromes geriátricos e incluso comprometer la vida de pacientes con reserva funcional limitada. De ahí, la importancia del conocimiento y diagnóstico de la fragilidad en la toma de decisiones del tratamiento de pacientes con cáncer. Hay que elegir la mejor alternativa en un paciente y un momento determinados.
En los ancianos la decisión del tratamiento se compone de factores dependientes del paciente: incapacidad, expectativa de vida y tolerancia al tratamiento, y de factores dependientes del tumor: agresividad del tumor, riesgo inminente de manifestaciones clínicas urgentes y/o de muerte.
El armamentario del tratamiento antitumoral incluye cirugía, radioterapia, quimioterapia, hormonoterapia y terapias biológicas con agentes diana, y en muchas ocasiones la asociación de varias de ellas.
Almudena Escribano Ruiz